Un palo y un cubo para las instituciones.
Los valencianos le reciben con un palo a Pedro Sánchez y un cubo a Felipe VI, y barro a Letizia. ¿Les ha hecho despertar su mala conciencia?
Con la catástrofe vivida en Valencia, y el episodio vivido durante la visita de los reyes, Felipe VI y Letifica, junto al presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, no ha sido uno de sus mejores días.
Parece ser que los reyes quieren volver a visitar la zona afectada. No deben presentarse si antes no ha llegado la suficiente ayuda, y ya que la institución de la Monarquía se ha desvinculado de la del Poder Ejecutivo debe haber un gesto por parte de la Casa Real de enviar ayuda material, como gesto al haber escuchado a los afectados. Se lo han gritado a los reyes : ¡Necesitamos ayuda!
En cuanto a que el rey se ha jugado la vida, como declara la experta en la Casa Real, Pilar Eyre, me parece un poco exagerado, no eran asesinos los que los echaban palo en mano, cubo, y barro, sino gente indignada que los echaba de su territorio sin haberlos invitado. Si hubieran llegado al día siguiente de la catástrofe el recibimiento hubiera sido diferente. No han medido los tiempos. El dolor aumenta con el paso de las horas con la incertidumbre de los familiares y amigos desaparecidos. De ahi la impotancia de acudir cuanto antés. Hubiera sido lo suyo.
En cuanto a poner en cuestión la integridad física de los reyes de España, disponen de seguridad que les protegen en todo momento, están entrenados para ello. Si no ha sido necesario sacar el arma y emplear la fuerza indica que el nivel de riesgo no era tan alto. El protocolo de seguridad no tiene la misma valoración vista desde unas imágenes cargadas de sentimientos de dolor.
Una piedra de barro, un palo, y un cubo son las herramientas con las que están trabajando los valencianos para limpiar su ciudad, su pueblo, su casa, su garaje, sus calles, ha sido la forma de demostrarles que no eran bienvenidos y que se fueran por donde habían venido.
En cuanto a las palabras del rey Felipe VI al dirigirse a un grupo de jóvenes para decir que no creyeran todo lo que se escucha en los medios de comunicación. Los periodistas han sido los que han estado desde el minuto uno abandonando el guión de sus programas en sus medios de comunicación tanto públicos como privados desde que se inicio el drama de la Dana, dejando las líneas de teléfono abiertas para las victimas y que pudieran hacer un llamamiento de socorro, intentar localizar aquellos que se encontraban en una situación de riesgo de alto nivel. La noticia ha llegado en tiempo real con testimonios directos de aquellos que lo estaban viviendo. No debe hablar mal de los medios de comunicación cuando han estado a la altura de las circunstancias. Las cadenas de radio y televisión han enviado sus unidades móviles a las zonas afectadas para trasladar la noticia de la verdadera situación. Mientras las Instituciones han brillado por su ausencia.
El error ha sido que ni el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, el ministro de Interior, Fernando Grande Marlaska, y la ministra de Defensa, Margarita Robles, ni los reyes de España, Felipe VI y Letizia acudieran de inmediato a valorar la situación de emergencia in situ y acercarse a los afectados mostrando su solidaridad. En estos casos el medio de locomoción a utilizar es el helicóptero para trasladarles. No hay excusa, y el pueblo valenciano tardará en perdonar, si es que perdona.
Tras este recibimiento en Paiporta les ha hecho tomar conciencia de la situación a los reyes de España y se han puesto manos a la obra para ayudar a las victimas de la Dana, anulando su agenda oficial de esta semana. Se han puesto a trabajar para los valencianos. Han rectificado su mal comportamiento.
Mientras tanto, Pedro Sánchez quiere sacar beneficio político de esta desgracia humana uniendo la aprobación de los presupuestos Generales del Estado al presupuesto de ayuda a la Comunidad de Valencia.