Trump y Macron unidos.
La visita oficial de Macron a EEUU. revela su amistad con Trump, con el saludo a la francesa con dos besos, risas, y la confianza con que Trump le ha cogido de la mano para que dejara de hablar con los periodistas en el jardín de la Casa Blanca.

Visita oficial de Emmanuel Macrón a Estados Unidos, que toda Europa espera con interés con la vista puesta en la futura relación con el presidente de Estados Unidos, Donald Trump.

El presidente de Estados Unidos, Donald Trump y la primera dama, Melania Trump, esperan en la entrada principal de la Casa Blanca. la llegada del presidente de Francia, Emmanuel Macron y su esposa Brigitte Macron. Para la ocasión Melania ha elegido un vestido corto por encima de la rodilla negro con capa y unos stilettos negros, la primera dama de Francia, ha elegido un tres cuartos blanco compuesto por un vestido y abrigo con cinturón estrecho negro y salones negros de tacón alto.
El inicio del saludo entre Trump y Macron ha sido a la francesa con dos besos. Dicen que Trump llama al presidente de Francia el " Famoso Manuel"
La relación entre ambos mandatarios nos deja mucha información con su lenguaje no verbal, refleja una relación estrecha, la buena sintonía entre ambos líderes. Aparte de las bromas, los temas a tratar son el cambio climático con el Acuerdo de París, el armamento nuclear en Irán, los intereses de Francia y de Europa, y el acuerdo de paz de Ucrania y Rusia.
Los analistas políticos han sacado la conclusión que a Trump le interesa tener un aliado en Europa, y nada mejor que Francia.
Macron ha tomado el papel de líder de Europa para negociar con Trump, se puede decir, que el destino de Europa esta en manos de Macron, de esta visita oficial tienen que salir acuerdos importantes. Trump, le ha informado que se va a reunir pronto con Zelensky para firmar el acuerdo para resolver la deuda contraída por parte de Ucrania con Estados Unidos por la entrega de armamento militar. Macron ha puesto énfasis en sus palabras al recordarle a Trump que el armamento militar ha sido para poder defenderse de la invasión rusa, tal y como, le ha recordado cuando se ha atrevido a llamar a Zelensky dictador.
¿Quién es el dictador, Putin o Zelensky? En el lenguaje no verbal os aseguro que es Putin. Solo hay que fijarse en los rasgos físicos de uno y otro. ¿Cómo les ha afectado esta guerra a ambos? La expresión facial nos indica que a Putin esta guerra no le afecta tanto como a Zelensky, su mirada en gélida, no demuestra emoción alguna, al menos en público, no hay signos de fatiga, su discurso es de una calma total, no sube y baja el tono de voz para expresar sus emociones con su estado de ánimo. No revela sus intenciones como buen ex-agente de la KGB.
En cambio, Zelensky, esta demacrado, con signos de fatiga, llega a elevar el volumen de su voz para reclamar los intereses de Ucrania ante Europa y Estados Unidos en su defensa contra la invasión rusa, lo que demuestra su indignación e impotencia, no se viste con traje y corbata como Putin, porque son tiempos de guerra no de debates políticos para ir vestido con corbata, sino de combate como los soldados que luchan por la independencia de su tierra.
Los dictadores como Putin, son hombres muy fríos y la muerte no les asusta. Las bajas en el frente forman parte de la ecuación de una guerra. A sus familiares, les esta permitido llorar su muerte, pero no a su presidente que oculta hasta las últimas consecuencias esa baja para evitar pagar a la familia lo que les corresponde legalmente por la perdida de un hijo, un marido, o un padre. Esa es la realidad.
Putin no ha tenido la oportunidad de quitar de el medio a Zelensky, hasta su mujer. Olona Zelenska ha llegado a declarar a los medios de comunicación estar amenazada de muerte por parte de Putin. Los servicios de inteligencia de ambas naciones están al mismo nivel. No cae ni uno ni otro.
La única diferencia es que Zelensky ha pasado tres años de su vida con mucho dolor y sufrimiento al lado del pueblo ucraniano, y Putin ha provocado una guerra sin los resultados esperados. Este es mi análisis de ambos dirigentes en este conflicto bélico.
Zelensky ha encontrado un buen aliado en Macron, le defiende sus intereses y su imagen política de cara a Estados Unidos. Digamos que le ha preparado el terreno en su próxima visita oficial a la Casa Blanca, para la firma del acuerdo económico con el aval de las tierras raras, y para afrontar los términos del acuerdo de paz entre Rusia y Ucrania. Zelensky tiene que poner las condiciones al ser de Ucrania y los ucranianos los dueños de ese capital natural depositado en las tierras raras que tanto interesan a Trump, que debería estar vigente preferiblemente solo durante los cuatro años de mandato de Trump y no por tiempo indefinido, o pasado este periodo de tiempo se puede revisar, anular, o reemplazar.
Ahora solo queda analizar a Donald Trump en cuanto reciba a Zelensky en el despacho oval, voy a ver en que términos se redacta el compromiso de pagar el armamento cedido a Ucrania, con la explotación de las tierras raras con un contrato entre ambas naciones, espero que determinado por un periodo de tiempo establecido por los números con las cuentas a saldar, y el coste en un futuro por brindar una garantía de seguridad por parte del ejercito americano durante un periodo de tiempo para garantizar la paz y reconstrucción de Ucrania. Europa no es una garantía de seguridad, al menos, en el primer periodo de tiempo de paz.
Macron le ha preparado el terreno a Zelensky, y antes de que se enfríe Trump, debe acudir a la mayor brevedad posible al despacho oval a firmar su acuerdo entre Ucrania y Estados Unidos. Macron le ha dejado claro a Trump quién es Putin y quien es Zelensky.
Lo que ha quedado claro es el papel de ambos mandatarios: El mediador entre Rusia y Ucrania es Trump, y el mediador entre Estados Unidos y Ucrania es Emmanuel Macrón.