La "edad dorada" de Trump
En esta nueva era Trump el lujo es apreciado, el chef español José Andrés ¡Despedido! Estados Unidos se aleja de Europa. Firma la retirada de la OMS y de los acuerdos del clima.
En la toma de posesión de Donald Trump el máximo representante del lujo francés, François Arnault, como presidente y director general del grupo conglomerado del lujo LVMH acudió acompañado por dos de sus hijos Delphine y Alexander Arnault. Arnault.
Este ilustre invitado se mueve entre el Elíseo y la Casablanca. La primera dama, Melania Trump es una adicta al lujo, un motivo más para estar al lado de su amigo en un día tan histórico para Estados Unidos y tan triste para Francia que ya siente los malos augurios con la llegada de Trump.
Parece que el primer ministro de Francia, François Bayrou, no comparte esta relación estrecha con el presidente de Estados Unidos, Donald Trump al que considera una amenaza para Francia y Europa. La amistad entre Arnault y Trump se remonta a los años 80 cuando ambos llevaban negocios inmobiliarios, de hecho, el grupo de este conglomerado del lujo sus inicios fueron en el sector inmobiliario antes que el lujo. Acusa a Trump de querer acaparar toda la investigación y la inversión del mundo. La familia Trump al completo son consumidores del lujo francés. Debería de ser un motivo de alegría para Francia.
Para Donald Trump unos son bien recibidos y otros despedidos como es el caso del primer español que despide en cuánto a hecho su toma de posesión del cargo, y no es otro que el chef, José Andrés, fundador de la ONG World Central Kitchen. Ostentaba el cargo de deporte, ejercicio y nutrición en el mandato de Joe Biden. Al chef español no le ha valido de nada tener la nacionalidad estadounidense. Supongo que su ONG no se va a beneficiar de la cantidad económica asignada por parte de la nueva administración Trump.
El lujo francés será el más beneficiado y Europa la más perjudicada con la administración Trump. Por lo pronto un español ha caído. En el espectro político parece que pocos tienen la capacidad de poder negociar la nueva era Trump.
Un político que lejos de aburrir sorprende en sus discursos con sus intenciones, motivado por ganar el respeto perdido a los Estados Unidos de América. Durante su discurso de investidura se ve a los congregados, entre los que se encuentran el ex presidente de Estados Unidos Bill Clinton junto a su esposa Hillary Clinton, que al escuchar que su intención es cambiar el nombre del Golfo de Méjico por el nombre del Golfo de América. Al escuchar estas palabras Hillary Clinton rompe en una carcajada, sorprender a una mujer como Hillary Clinton con todo su bagaje tiene mérito, a diferencia del resto que lo escuchan serios como su rival en estas elecciones, Kamala Harris, que atiende muy seria a sus palabras. A continuación, algunos de los presentes se ponen de pie y rompen en un aplauso.
Al menos España ha estado representada en la toma de posesión de Donald Trump no como país BRICS, como lo ha denominado Trump por error, sino como un país de Europa, con la presencia del líder de la formación política de Vox, Abascal. Lo importante es que a España se la tenga en cuenta desde la primera potencia mundial para futuras negociaciones desde Europa, y Abascal es un nexo de unión.
Ayer escuche a un analista político que el presidente de España, Pedro Sánchez, se esta poniendo delante del toro y lo esta provocando con respecto a sus comentarios contra Donald Trump. Lo va acabar embistiendo. Que piense que no le embiste a él sino a España. El ministro de Asuntos Exteriores, José Manuel Albares, esta siendo más prudente con sus palabras haciendo uso de la diplomacia.
A Donald Trump le apoyan una parte de los hombres más poderosos del mundo. Es un político con carisma e influyente, y esta dispuesto a vivir su "Edad dorada".