Sánchez, sin coche blindado

En Paiporta se han roto muchas vidas y la luna trasera del "coche oficial" de Pedro Sánchez, este suceso ocurrió al quinto día de producirse la Dana durante la visita a la zona afectada. 

En la visita a Paiporta uno de los objetivos para agredir verbalmente y materialmente fue el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez. Si no me equivoco, ha habido un error en lo referente a su seguridad respecto al coche que lo traslada a la zona afectada, se ha dicho que el coche oficial de Pedro Sánchez su luna trasera fue destrozada, entiendo que el coche no reúne las medidas mínimas de seguridad como es que sea blindado. Es muy grave que un coche de un presidente de un Gobierno no tenga garantizada su seguridad.

Os pongo en situación; en el coche van sus guardaespaldas, para que me entendáis, son policías que portan armas reglamentarias tanto el conductor como el copiloto, y en el asiento de atrás va el presidente del Gobierno, si el objeto con el que se ha roto la luna impacta mientras Pedro Sánchez esta en interior del vehículo. ¿Quién es el responsable?

Si le pasa algo al presidente del Gobierno de España, la responsabilidad se reparte entre Moncloa y el Ministerio del Interior. Qué grave descuido ha tenido el ministro de Interior, Fernando Grande-Marlaska, no asegurarse de la seguridad de su JEFE.

Para romper la luna de un coche blindado tienes que golpear más de una vez, y a ser posible en el mismo punto lo que te lleva tiempo, me da igual el objeto que se utilice, tanto si es una pala, un palo, o una piedra. El impacto de un proyectil no atraviesa el cristal blindado al primer tiro porque rebota, tienes que pegar varios tiros en el mismo punto para atravesar el blindaje. No es tan fácil. Solo que con un coche sin blindaje hay más posibilidades de atacar a un presidente.

Solo en España sucede esto. Nadie ha reparado en esta negligencia que podía haber salido más cara que reponer la luna del vehículo oficial.

Cuando he escuchado en las redes sociales que Pedro Sánchez se fue como un cobarde comparando al jefe del Estado, Felipe VI que si se quedo y avanzo junto a la reina Letizia entre la multitud desesperada, nerviosa, y alterada. La decisión la toma el servicio de seguridad del presidente del Gobierno de España. Mi respuesta ante aplicar el protocolo de seguridad no es cuestión de ser un cobarde o un valiente, sino prudente. Es una decisión que se debe tomar en el momento, si se valoro evacuar a Pedro Sánchez, y el acepto, supongo que la situación lo requería. Se trata de controlar una situación que se te puede ir de las manos. La presencia del presidente del Gobierno lejos de calmar los ánimos el efecto era todo lo contrario, lo más prudente es retirarse a tiempo.

Un protocolo de seguridad no valora lo que piensen con sus valoraciones los ciudadanos de a pie. Es algo más serio, es proteger la integridad física por ambas partes, tanto la del presidente como la del pueblo valenciano. Si alguien se atreve a tocar al presidente del Gobierno, puede haber una reacción no deseada por parte de los servicios de seguridad.