La moneda que se usa en Internet, las criptomoneda, el bitcoin, hoy tiene mala prensa.
Las redes sociales se desinflan, las criptomonedas, un dinero que no ves, no tocas, no hueles, que no existe en el mundo real y parece que procede del metaverso, ha explotado. Y se ha reflejado en el código penal como delito a perseguir.
La plataforma de criptomonedas, FXT, una de las más importantes del sector. se ha declarado en bancarrota, debido a las fuertes caídas en todo el mercado de las criptomonedas, justo un año después de que el bitcoin alcanzara máximos históricos, y su jefe y máximo responsable, Sam Bankman-Fried, un multimillonario con tan solo 30 años, dimite. Lo único que ha dicho es que pide disculpas por su error. Debe ser la frase de la semana en Estados Unidos, lo mismo que ha dicho el dueño de Facebook al tener que despedir a 11.000 trabajadores.
La plataforma no tiene liquidez, empleó millones de dólares de sus clientes, en operaciones muy arriesgadas. Y ahora tiene un agujero de 8.000 millones de dólares. La conversión de dólares a criptomonedas.
Ya lo dijo Warren Buffet, el dinero siempre tiene que estar físicamente en los bancos. Nunca ha creído en las criptomonedas. El gurú de la economía global lo ha manifestado públicamente en todos los medios de comunicación su opinión sobre esta moneda. ¿Nadie le escucha? Premio Nobel de Economía.
¿Cuántas estafas se han llevado a cabo con el pago de esta moneda virtual, para que ya este tipificado como un delito en el código penal? ¿Cuánta gente se ha arruinado con el uso de esta moneda? ¿Cuántos han sido estafados? No es una moneda de curso legal, con esta definición ya te indica de lo que estamos hablando. ¿A quién reclamas?
Actores, productores de cine, presentadores, y demás personajes conocidos, los llamados famosos, apoyando el mundo de las criptomonedas, haciendo campaña para comunicar que estaban muy contentos con el dinero que habían ganado. Ganar dinero fácil. El dinero nunca se gana fácilmente.